Ya lo hemos repetido hasta el hastío: La Nación vive días desesperantes y lo expresa visceralmente. Quizás la veda electoral le funcione como bálsamo ante tanta repulsión que le provoca que un gobierno, por ella caracterizado como dictatorial, autoritario, endeble económicamente, sin rumbo preciso, abandonado por el viento de cola, en caída libre, sin futuro asegurado, el domingo sea reelecto con una cifra de votos que la asusta pero que no la hace replantearse nada. Al contrario. Esta semana, sus plumas van del sangriento populismo al miedo a la censura, como si fueran una bola de flipper (¿se acuerdan?) que quedaba encerrada un largo rato entre dos hongos.
Entonces Pagni titula como si el destino de CFK ("la señora de Kirchner", la sigue menospreciando) pendiera de un hilo y quisiera que volviera esa imagen de mujer débil sin talento para gobernar que ningún fruto les deparó pero que se esmeraron en construir durante tanto tiempo, especialmente luego de la muerte de NK. Por el contrario, Majul le dice a la gente que si vota mucho por Ella, le va a dar más impunidad. Es decir, la democracia como fuente de exención ya que todas mis elucubraciones premeditadas fracasaron.
La editorial de ayer pide ajuste y más ajuste, como si nada hubiera aprendido estos años. Sigue manejando un lenguaje rancio que le permite seguir analizando la realidad socioeconómica con sus recetas fracasantes ("La gente descubrirá que esta fiesta de consumo y crecimiento precario no resulta sostenible", se promete para seguir esperando el estallido que destroce al país) que la lleva a defender, en la editorial de hoy, a los autores de aquéllas ("En agrupaciones estudiantiles ligadas al kirchnerismo se ha dejado trascender el deseo de que el estudio de las teorías clásicas se limite a Karl Marx y a John Keynes. Se dejaría así de lado a los exponentes de las corrientes liberales, como Ludwig von Mieses, Friedrich von Hayek o Milton Friedman. Del mismo modo, han propuesto incorporar a los programas de estudios el denominado "modelo de acumulación con inclusión social", adoptado por el kirchnerismo. Excluir a pensadores clásicos reconocidos mundialmente por motivaciones ideológicas constituye un inexplicable resabio autoritario en pleno siglo XXI, propio de prácticas fascistas, además de un factor que sólo generará una pauperización intelectual"). Ferreres, el lunes, también recomendaba y abogaba por los packs tradicionales de devaluación, recorte, suba de tarifa ("efectuar las correcciones necesarias", indicaba cual cirujano tan apelado en los 90's).
Para La Nación, los planes económicos impuestos por los organismos de creédito internacionales siguen siendo el paraíso socioeconómico del cual no se puede mover un país que se precie de iluminado y serio, como también, como pide Venturita, lo es uno que posee un gobierno que renuncia a ser votado mayoritarimaente por la gente, es decir, poseer una legitimidad de origen que le permita sentirse ratificado en las urnas, donde debe ser (quizás la tradición golpista de la empresa de los Mitre/Saguier les impida asimilar dicho concepto democrático elemental). "Normalmente, en este contexto, la Presidenta no tendrá incentivos para gobernar por decretos de necesidad y urgencia. Todo lo que envíe al Congreso le será otorgado. Pero la situación mostrará la debilidad del Congreso", gataflorea el pobre Adrián -preoucpado porque los jueces que él controla desde cerca se animen a derribar cautelares y avanzar en causas que perjudiquen a sus patrones-, antes ofuscado porque CFK sacaba las cosas por DNU (en verdad, es una de las que menos los usó desde la vuelta de la democracia), ahora porque sacará leyes.
Ante este panorama, les queda volver a defenestrar a esa oposición que supieron ganarse pero que rechazó la gente el 14A y que volverá a censurar este domingo, cuando el mandato popular les cierre la carrera a varios, aunque se nieguen. "Las fuerzas opositoras perdieron las elecciones antes de salir a la cancha. Con anterioridad a las primarias, no supieron leer el mensaje de una vasta parte de la sociedad que les pedía cohesión detrás de un programa común alternativo", se excusa Laborda, como si el engendro Alfonsín-De Narváez no le alcanzara para convencerse de que no se trata de sumar cuantitativamente.
En este marco, Tomacito sigue crispado y decidió poner en una columna todo los epítetos que destiló el miércoles de la semana pasada ante la baba cayendo de la boca de Bodnelli y Alfano: "En nuestro país en vísperas de una nueva elección, hay zonas oscuras y peligrosas. Ser un crítico del gobierno nacional cierra puertas. Hay listas negras. Hay gente de la cultura que no debe ser, por orden oficial, nombrada ni invitada, por no adherir al modelo. Desde la Biblioteca Nacional, refugio de la cultura oficial y umbral prohibido para las decenas de intelectuales críticos del poder, hasta las agencias de noticias oficiales, pasando por Página 12, hay libros que no se comentan, autores que no se nombran, colaboradores borrados de las agendas culturales, generadores de cultura eliminados de los convites nacionales e internacionales, todo porque no son kirchneristas ni apañan el modelo. Los canales oficiales están copados por sectas afines al Gobierno, usufructúan dineros que provienen de aportes de trabajadores de todos los colores políticos y los usan para difamar opositores, insultarlos, y hacer propaganda oficial. Funcionarios no pueden expresar opiniones, adherir a partidos o firmar solicitadas a favor de otros candidatos que los del Frente para la Victoria, por miedo a ser desplazados de sus trabajos. Un deporte como el fútbol es un pretexto para que el Gobierno lo use para producir una catarata de panfletos que se visten de obras públicas".
Y sigue, eh. "El Gobierno ha usado a las organizaciones de derechos humanos como biombo detrás del cual lleva a cabo una política que ha sido denunciada por corrupción en infinidad de denuncias. (...) Se han degradado sucesos que hacen patria, como el juicio a las Juntas, y hombres como el jefe de Gabinete llevan la voz cantante en el festival de necedades cancheras que pretenden humillar a hombres como Strassera. Se borra el prólogo de Sabato, se insulta a Tato Bores para lastimar a su hijo que escribe en Clarín. Los medios y los modos usados por este gobierno, y el blindaje cultural que resulta del famoso "relato" que lo acompaña, pertenecen a los fascismos", y más. Continúe aquí, si desea masoquearse con un "intelectual" desqueciado por la Historia.
Todo con tal de que la realidad se acomode a mi relato. Eso que tanto le critican al kirchenrismo. Como Magda, ayer, acusando a VHM de ser digitado por el gobierno (¡¡¡Víctor Hugo!!!). Es decir, acusar al otro de lo mismo que se critica cuando se les dice que hablan por sus patrones.
¡Un psicólogo, a la Derecha! Lo de la pomada que lo decida cada uno.
viernes, 21 de octubre de 2011
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1 comentarios:
De cualquier modo, al reivindicar los juicios a las juntas del gobierno alfonsinista, T. Abraham es, en el contexto de La Nación, un ultraizquierdista furibundo.
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