Ahora que fue papá, Mauricio recibe un lindo presente por parte de las DOS editoriales de hoy de La Nación, tan condescendiente siempre con él y la esperanza de ir construyendo desde hoy mismo la posibilidad de que la derecha retome el gobierno en el país para limpiar la República de toda la grasa kirchnerista dictatorial.
La primera editorial se enoja con una jueza, acusándola de ser anti Macri, igual que el juez Gallardo (procedimiento que no se compadece con un calificativo pro Macri con aquellos que fallan en su favor. El antecedente de este accionar son los procesamientos de Mauri en ese tema de las escuchas ilegales que le armó el gobierno K por sus serias condiciones de disputarle el popder en 2011 que luego no se traslucieron, pero bueno. No importa), por prohibir que se filme a los chicos ya los docentes en las escuelas.
"Quienes cuestionan el valor de esas cámaras dentrode las escuelas parecen olvidar que los rostros de esos mismos chicos son reproducidos por centenares de cámaras en comercios; estaciones de servicio, de trenes y de subtes; aeropuertos y entidades bancarias, por citar sólo algunos espacios públicos y privados que son sometidos a videovigilancia", intenta justificar La Nación, tan afecta a los métodos represivos antes que a los preventivos.
En la otra, se presenta a los estudiantes que reclaman por sus derechos como patoteros, delincuentes, indisciplinados, y demás epítetos propios del lenguaje oliva que tanto excita al diario de los Mitre/Saguier. En ese contexto, la editorial aprovecha para defender otra medida del gobierno de la CABA: "En los establecimientos educativos que se encuentran alejados de los centros urbanos, muchos de ellos con difíciles accesos, sin comodidades mínimas y con enormes limitaciones en infraestructura escolar, se percibe paradójicamente un mayor compromiso de los chicos por contribuir a completar su educación. Docentes y alumnos logran involucrarse en la solución concreta de los problemas educativos, asumiendo muchas veces ellos mismos la tarea de pintar el establecimiento, repararlo o conseguir los elementos indispensables de enseñanza. La actitud de esos docentes también contrasta notablemente con la de colegas porteños, que el martes pasado decidieron un paro de 24 horas para mostrar su disconformidad con un proyecto presentado por el gobierno de la ciudad ante la Legislatura para crear la Oficina Unica de Clasificación Docente, en reemplazo de las 14 juntas que funcionan para el ingreso en el magisterio".
Menos mal que está La Nación para asegurarle sólo sonrisas a Mauricio, porque esos K malditos ya están haciendo de las suyas hasta en Boca. Todo para molestar al bueno de Macri y al honesto de Angelici.
martes, 11 de octubre de 2011
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