"Esto fue un acto de corrupción, una estafa. Es una vergüenza
para todo el país". Con la irracionalidad que mostró durante los últimos tiempos, Susana Trimarco habló anoche en Tucumán,
después del fallo que absolvió a 13 personas en el caso Marita Verón.
"Estoy más fuerte que nunca
–impostó Trimarco–. No voy a derramar una sola
lágrima por estos delincuentes que quedaron libres", espetó.
Denunció que antes del fallo había recibido una carta
en la que supuestamente le revelaron que uno de los imputados, Rubén “La Chancha”
Ale, "había puesto una cantidad de dólares a los jueces". "Hablé con el
tribunal y les mostré la carta y, por supuesto, lo negaron.
Indudablemente esa denuncia no era mentira", atacó.
"Destruyeron la vida de mi hija, la mía, la de Mica. La de mi esposo,
que murió sin poder ver a su hija”, exageró. "Es una etapa de mi vida que
termina. Pero mañana comienza otra. Estos tres jueces estafadores son
una vergüenza... No voy a parar hasta que haya juicio político. Y a Marita vamos a seguir buscándola. No vamos a parar", amenazó sin límites.
Fuente de inspiración
miércoles, 12 de diciembre de 2012
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario