"Hoy domingo habrá una congregación en la plaza central para recordar el bombardeo ocurrido en el área de material Río Cuarto en septiembre de 1955. En aquella oportunidad, aviones militares de Villa Reynolds (San Luis) atacaron la compañía riocuartense por ser leal al gobierno constitucional del entonces presidente Juan Domingo Perón.
En el anuncio estuvieron presentes Alberto Levi, de la asociación ex presos políticos, Guillermo Asworth, docente universitario, Mariano Cessano de la agrupación HIJOS y Walter Chavero, subsecretario de Derechos Humanos, todos integrantes de la Comisión por la Memoria.
Levi adelantó que en la base aérea de Las Higueras (localidad pegada a Río Cuarto y donde se encuentra actualmente la guarnición atacada en 1955) será señalizado el lugar preciso donde impactaron las bombas de aquel atentado y que paralelamente se harán talleres en escuelas secundarias de la ciudad “para mantener viva la memoria”".
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"La “Revolución Libertadora”, que en definitiva más que libertad trajo más decadencia, desencuentros y odios en la sociedad, se gesta en gran medida en la ciudad de Río Cuarto, desde donde el general Videla Balaguer, entonces comandante de la Cuarta Región Militar con asiento en esta ciudad —oficial que había recibido la medalla peronista pero no dudó en traicionar a Perón—, trabajó para organizar el golpe de Estado. Después del vergonzoso bombardeo a la Plaza de Mayo, incluida la Casa Rosada, con centenares de ciudadanos indefensos muertos, mayores y niños, esta revolución tuvo “éxito”.
Pero el general Balaguer no estaba solo, al contrario, muy bien acompañado, no solamente de hombres de las Fuerzas Armadas. Muchos ciudadanos e instituciones apoyaban decididamente aquel golpe y festejaron el “triunfo”. El 21 de septiembre de 1955 a las 10.00, los estudiantes riocuartenses adherentes de la revolución hicieron oficiar una misa en la Iglesia Catedral para rendir homenaje a los soldados y civiles caídos en la lucha fratricida, “mártires de la gesta libertadora”; luego colocaron una ofrenda floral al pie del monumento del general San Martín y suspendieron los festejos previstos de la primavera y del día del estudiante.
El 1 de octubre siguiente se festejaba con emoción en Río Cuarto el “Día de los Vencedores”, para honrar al ahora Interventor Federal de la Provincia, general Dalmiro Videla Balaguer. La ciudad se había convertido en sede del gobierno provincial. El acto central se desarrolló frente a la Iglesia Catedral con la celebración de un Tedeum de Acción de Gracias. Cuando la comitiva llegó a la calle San Martín con destino a la Plaza Roca, estas arterias ofrecían un aspecto multitudinario; gran cantidad de personas emocionadas por los “logros revolucionarios” se habían concentrado para vivar fervorosamente a la Patria y al general Balaguer, agitando pañuelos blancos mientras repicaban las campanas de la iglesia.
Unos días después, el 15 de octubre de 1955, la “Comisión del Magisterio” de la ciudad de Río Cuarto invitaba a las autoridades civiles, militares y eclesiásticas, a los colegas y a toda la ciudadanía a participar de los actos en homenaje a los “Héroes de la Revolución Libertadora”: otra misa en la Catedral, ofrendas florales y alocución de los organizadores. Fue masiva la concurrencia de público".
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Videla Balaguer y su huida de Río Cuarto vestido de cura
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