Después de la represión de De la Sota

"Las esquirlas de los incidentes de ayer llegan hasta hoy en la forma de un paro de 24 horas de judiciales, municipales y de Epec. Y un dato clave: los docentes (UEPC) harán asambleas de tres horas por turno entre las 9 y las 16.30. En la práctica, casi no habrá clases en escuelas de Córdoba.
Sadop dispuso asambleas de dos horas por turno y el SEP parará tres horas por turno, al igual que los bancarios. Lo más importante es que hoy a las 10 habrá otra concentración de la mayoría de los gremios estatales frente a Tribunales", informan en Día a Día Córdoba.
Mientras tanto, La Voz de Clarín intenta justificar la represión policial con la figura de los infiltrados y además involucrando a CFK en el conflicto.
"Cuando la violencia aún no había terminado y los escombros ya cubrían tres plazas, algunos dirigentes gremiales insinuaron que los desmanes habían sido provocados por “infiltrados”. Se rindieron rápido ante la elocuencia de las imágenes. Entonces, la culpable por los hechos vandálicos que protagonizaron los miembros de algunas de las columnas sindicales pasó a ser la Policía", acusa Guevara.
"La violencia que se desató ayer en la ciudad de Córdoba es una consecuencia directa de la falta de diálogo entre la Nación y la Provincia y debe ser remediada en términos democráticos.
Es cierto que la economía real es un condicionante que interpela a todos los actores sociales y los expone en todas y cada una de sus 
contradicciones. Que quienes declaman su 
vocación perpetua por la expansión de 
derechos, ahora demandan un ajuste y protestan en simultáneo cuando lo aplican.
No es menos verdadero que quienes obtuvieron el consenso político unánime para
reclamar recursos de la 
Provincia lo amputaron de 
inmediato por el protagonismo solitario de sus propios números. Tanto como que la restricción ejecutada es heredera de una ilusión pródiga en padres y huérfana de cauce: la de la extensión ilimitada de los 
beneficios públicos.
Hasta ayer, esa dinámica de contrariedades era tan sólo discursiva. Si se despeñó irresponsablemente hacia la vía de los hechos es porque la política –la sectorial, por cierto, y tanto más aquella cuyos liderazgos han sido votados para preservar el bien común– está equivocando el rumbo y debe reencontrarlo sin margen alguno para dilaciones", iguala la editorial del diario de Ernestina y Magnetto en Córdoba.
"Algunas palabras difíciles de entender, algunas actitudes complejas, algunos cruces a la vereda opuesta para actuar en medio de los disturbios y mucho gatillo ligero desde el pelotón... Todo ello seguido por discursos interesados desde los medios dominantes. Énfasis especial para afirmar que los hechos no derivan del ajuste previsional practicado por José Manuel de la Sota, sino de la actitud del gobierno de Cristina Fernández de Kirchner hacia la provincia. No vaya a ser cosa que estén armando el escenario para arrojar un muerto a la vereda. A esa película ya la vimos. Y si algo aprendimos en este país es que la vida y la libertad son una sola", advierte Ascasubi.