Ma' qué massazo. ¡Fierrazo!

Cuando no sale verbalización convincente o verosímil (o en la que se pueda creer inútilmente) es que está por romperse el espejismo de que nos las sabemos todas. Inclusive, las asegurábamos a futuro.

Sucede que a veces ni esas predicciones -por las que apostábamos que, si se daban, nos iban a rellenar la soberbia intelectual- tampoco son suficientes.
Lo que aparece con mayor insistencia es que no basta el triunfo a nivel nacional para tantos sinsabores puntuales, muchos de ellos inesperados. Algunos hasta risueños, como la derrota en Córdoba a manos de un ex referí.
Pero ahí nomás aparecen ayudas al ego y a pesar de todo, el kirchnerismo cordobés retuvo su 10% del 2009, mientras que en PBA retrocedió varios puntos con respecto a aquella derrota de NK por 1, ante el próximo a desaparecer (a menos que le regale sus votos a Massita. El Colo está en condiciones de negociar muchas cosas).
Parece que en bancas, el oficialismo sigue igual (aunque aquéllas predicciones nos hacían prever una ganancia de casi 10, entre diputados y senadores proyectados y tirados sobre el rostro para traccionar más votos aún en octubre. ¿Cuatro, dice Eva?).
El instinto sobrador ahí salta y hace ver que el segundo partido ronda el 10% a nivel nacional (el tuerto que se ríe) y que la "Oposición" parece más fragmentada aún (hasta con derrotas como las del macrismo, festejadas con sonrisas y bailes).
Ahora. Todo esto en el mar sinuoso de las internas. Cuando uno piensa en octubre apuesta, espera, que la cosa no sea tan fulera y que mucha gente se asuste como cuando les agarró el julepe que les agarró a los santafecinos cuando casi le hacen ganar a la Tota la gobernación.
¿Pero no ven que todos estos enunciados son desde una posición petulante que debería mutar?
Ahí se descubre la comodidad del ganador, pero recuerda que cada dos años, el kirchnerismo es como si le tirara una soga a sus oponentes. No quiere que mueran y lo dejen solo. Los auxilia con una actuación mediocre (ésta podría ser calificada de mala tranquilamente. Se perforó el piso artemiano del 30%) y elude elegantemente las denuncias de fraude que se iban a venir si ganaba.
El kirchnerismo generoso.
¿Qué más pedante que pensar así?
Mejor asegurar que las cosas se están haciendo mal y que hay que mejorar.
Con gestión y esfuerzo. E inventiva, agrega Abal.
El problema sería que además de vacíos, esos consuelos ya no sirvieran de verdad, y que cada vez más gente estuviera decidida a saltar al vacío (¿la grieta?) aunque le prometan que caerá en él.
Ya es tiempo de otra cosa, ¿han decidido?
"No esperen que en estos 2 meses y medio les prometa cosas con las cuales no podré cumplir", les avisó CFK.
Con diferente maquillaje y tono de voz, llamó a hacerlo conocido a su candidato en PBA.
Hasta de eso se tiene que encargar.
Al costado, varios lastres entonaban sus últimos cánticos. Octubre siempre estuvo cerca.