viernes, 9 de agosto de 2013

#8A: El martes 13 de Clarín

Quizás deba pasar mucho tiempo hasta que se pueda dimensionar el video que ilustra éste post. Lo que en él hay. Lo que refleja en términos de simbología de una época (para algunos, iguala a Magnetto con Yabrán como expresión máxima del poderoso mafioso impune). En crudo, el hombre amante de las sombras teniendo que salir nuevamente, débil. Ni a Clarín se le ocurrió hoy titular en tapa: "Salvaje agresión K contra el CEO de Clarín" (apenas una nota interior con todo el despliegue de términos anti K y un intento de explicar lo inexplicable). Ni para victimizarse les dio, luego de una jornada como la de ayer durante la cual todos sus medios de todo el país NO informaron sobre la audiencia de mediación entre Magnetto y Víctor Hugo.
¿Qué mayor censura que esa?
¿Quién tiene hoy la capacidad en la Argentina de cercenar a ese nivel una noticia a los grandes públicos?
Muestra de las condiciones de producción de semejante suceso, hubo que disponer de 24 horas para que la cúpula del Grupo decidiera qué decir sobre una acción que si buscaba "humanizar" (¿victimizar?) a Magnetto logró lo diametralmente opuesto. Hasta logró convocar a varios miles apoyando al periodista más satanizado por el holding.
Y para colmo, a la noche, el cacerolazo, previsiblemente, fue una lágrima del pasado, lleno de desgaste y soledad. A uno de sus más encumbrados organizadores espontáneos, Luciano Bugallo, apenas si le salió balbucear cerca de la medianoche que "decenas de miles salieron a la calle sin micros, sin incentivos, sin banderas partidarias". Ni a los opositores más acérrimos se les ocurrió asomar la cabeza. Usaron a los indignados de teflón como preservativos (y al darse cuenta, ha desatado una interna entre los organizadores espontáneos). Especialmente, políticos que necesitaban resucitar. Anoche, las cacerolas ya eran piantavotos.
Un cierre de campaña cacerolo muy lejos de sus entusiastas expectativas previas de condicionar al electorado con una demostración de despliegue que supliera el escuálido armado opositor en todo el país.
Así, otro fin de semana de desilusión cacerola se acerca.
Inevitablemente.
Previsiblemente.
Luego del domingo, cada vez menos margen para la Corte.
Luego del domingo, la esperanza que la bronca cacerola pueda contenerse dentro del marco de las instituciones, esas que dicen amar y defender.
A propósito: el insulto de la esposa indignada de Massita a Danielito, ¿se refería al pasado o al futuro?
Duda: con el lánguido caceroleo de anoche, ¿se van cerrando la grieta, Giorgio?
Pregunta: no haber cumplido con el mandato de Francisco de hacer lío en la diócesis, ¿a cuántos padres nuestro y aves maría equivale? ¿O simplemente se posterga por tiempo indeterminado la bendición local (¡pecadores!)?

4 comentarios:

Carlos Soraire dijo...

Los fotógrafos que rodearon a Magnetto son fotógrafos o fue un manejo de personal de seguridad con cámaras que lo rodeó?

gem dijo...

al menos no le tiraron huevos como a Kris en Catamarca no? un apretujóncito nada más, pero es tan cobarde que se asustó

Luis dijo...

Muy bueno, Sergei.

Luis dijo...

PD: lo de Carrió... no se puede creer. Y clarín tratando de darle un empujoncito y tirándola al barranco, tampoco.

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