“Roca, uno de los constructores de la patria, que ha respetado las instituciones, es denigrado con una palabra horrible: genocida. Y se llega a decir que mató a 300 mil indios. Según cifras mucho más fidedignas, Juan Manuel de Rosas mató más o menos 3.200 indios en su Campaña del Desierto, y Roca mató la mitad de eso. ¿Por qué no se le dice genocida a Rosas, que lo único que hizo fue agredir a los indios y no incorporó esos territorios? Roca, sí. Se ocupó de que los indios se integraran a la Nación. Incluso, en su primera presidencia, 200 de esos indios patagónicos comenzaron a trabajar en la Marina. Fíjense como se miente y se distorsiona la verdad”, se quejó Aguinis.
“El revisionismo histórico habla de los pueblos originarios como si fueran un paraíso terrenal, admirable, cuando había luchas intestinas entre ellos. Es un tema que se trata de convertir en una acusación demoledora de Roca: que fue un genocida, cosa que no es cierta. Creo que se ha manifestado esto de forma grosera. La calle principal de Tucumán donde él nació ya no se llama Roca sino que tiene el nombre de otro insigne no genocida pero no sé qué que se llama Néstor Kirchner”, ironizó.
Aguinis -que en los últimos días ha estado muy activo defendiendo la matanza israelí de palestinos en la Franja de Gaza- no sólo defendió a Roca sino reivindicó su modelo de país: “No nos olvidemos que, cuando Roca asume su presidencia, clausura una etapa de desencuentros de argentinos e inaugura su período con las palabras paz y administración. Y efectivamente, su presidencia fue de paz y administración, la más progresista que tuvo el país, progresista en serio. Hoy progresista significa regresión. Progresista fue el gobierno de Roca, que logró que haya paz, orden, libertad y que las instituciones funcionaran bien. De modo que ahí tenemos un modelo de cómo debe funcionar un país, al que hay que estudiar, recordar y si es posible replicar”.
El encuentro se realizó en el CARI, el Consejo Argentino de Relaciones Internacionales, y también participaron el ministro de Cultura de Mauricio Macri, Hernán Lombardi (“Perdimos, porque no es casual dónde están o no están los monumentos a Roca. Si no damos un debate por Roca y la Generación del ’80, perdimos”), el intelectual del Grupo Clarín y ex asesor de la radical Margarita Stolbizer, Marcos Novaro, y el filósofo anti k Juan José Sebreli (“hoy Roca es satanizado, junto a Sarmiento”).
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