"Un centenar de trabajadores de Radiotelevisión Valenciana (RTVV) ha ocupado el plató de informativos de Canal 9, lo que ha impedido la emisión del informativo de las 14 de ayer, y han protestado en directo por un expediente de regulación de empleo (ERE) que afectará a un máximo de 1.295 trabajadores.
Durante unos siete minutos los espectadores han podido ver en pantalla a cerca de un centenar de trabajadores en el plató de informativos mientras algunos de sus representantes, megáfono en mano, han explicado que están dispuestos a "luchar" por defender sus puestos de trabajo. Entre gritos de "dimisión, dimisión", los representantes de los trabajadores han lanzado críticas contra la actual y anteriores direcciones de Radiotelevisión Valenciana y el PP.
Después de siete minutos en antena, la pantalla se ha fundido a negro y segundos después se ha retomado el documental sobre el fondo marino que se estaba emitiendo en lugar del informativo, algo que la Intersindical Valenciana, que ha ido narrando los acontecimientos a través de Twitter, ha tachado de "censura". La emisión del documental va acompañada de un rótulo que pide disculpas a los espectadores e informa de que no se puede ofrecer la programación habitual "por motivos del ERE".
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"Centenares de personas se han concentrado este martes a las puertas de la sede de Canal 9 en Burjassot (Valencia) para expresar su rechazo al "brutal y salvaje" Expediente de Regulación de Empleo (ERE), según lo han calificado, propuesto por la dirección del ente y que prevé hasta 1.295 despidos. Además de los trabajadores, han participado en el acto representantes de entidades ciudadanas y de formaciones políticas para dar su apoyo a las reivindicaciones de los empleados.
La concentración se ha desarrollado a partir de las 10.30 horas y durante el acto se han oído gritos contra la dirección del ente y se ha exigido la paralización de los despidos. 'ERE no' y 'Lladres (ladrones)' han sido los lemas más coreados.
Durante la protesta ha tomado la palabra la periodista que puso voz al primer informativo de Canal 9, Xelo Miralles, que ha manifestado: "Comenzamos a trabajar en RTVV con las manos limpias y saldremos con las manos limpias".
Por su parte, el presidente del Comité de Empresa, Vicent Midsuf, ha declarado que el ERE "supone una tragedia para los casi 1.300 trabajadores que van a echar a la calle y también un cambio de modelo de la radio y televisión públicas que van a pasar a ser privatizadas".
Para este portavoz, se busca que se asuma con dinero público "los más de 1.000 millones de deuda generada y todos los costes de la mala gestión de los últimos años y, en algunos casos, de la corrupción, porque hay varios directivos imputados en la trama Gürtel".
Midsuf ha calificado el ERE de "saqueo al erario público" y ha considerado que "su único y último objetivo es dejar el patrimonio de los valencianos al servicio de empresas privadas vinculadas al PP porque, si no, es incomprensible que se plantee el despido de todos los cámaras de una televisión o de todos los técnicos de una radio".
También ha asistido el presidente de La Unió de Periodistes Valencians, Joaquim Clemente, que ha subrayado que esta entidad está "a favor de una televisión pública que sirve para los intereses de la sociedad y, por tanto, en contra de este ERE salvaje, brutal y desproporcionado". En la misma línea, ha considerado que los despidos "no van a servir para el mantenimiento de una televisión pública y pone en peligro, si no da un golpe mortal, a un proyecto esencial para los valencianos".
Antes de la concentración el Comité de Empresa ha celebrado una reunión en la que ha decidido convocar dos días de huelga para los próximos 27 y 28 de julio en protesta por la propuesta de Expediente de Regulación de Empleo (ERE) presentada por la dirección del ente, que prevé hasta 1.295 despidos, han informado fuentes sindicales.
Asimismo, el organismo ha reclamado a la empresa la paralización de los expedientes anunciados ayer para los empleados que interrumpieron el desarrollo de la emisión de Canal 9 durante la primera edición del 'Noticies 9'".
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"La llegada del PP al Palau de la Generalitat en el verano de 1995 supuso un cambio radical en el rumbo de Ràdio Televisió Valenciana (RTVV), que había iniciado su andadura en 1989. Y no sólo afectaría al contenido de los informativos. Se ponía en marcha una profunda transformación que acabaría afectando a la sostenibilidad del ente. Hasta entonces, RTVV, cuyo director general era Amadeu Fabregat, contaba con una plantilla de 653 trabajadores, lo que le suponía unos gastos de personal anuales de 25 millones de euros, y una deuda de 22 millones. Era el resultado de un modelo que en muy poco se parecía al que desarrollarían el nuevo director general, Juan José Bayona, y los que le vendrían a la zaga (José Vicente Villaescusa, Pedro García y José López Jaraba).
Ahora, 17 años después, RTVV se encuentra en una situación límite: soporta una deuda de 1.200 millones y está en quiebra desde hace más de 10 años. Para afrontar esa realidad, el Consell ha resuelto aplicar un tratamiento extremo, cambiando el modelo mediante una nueva Ley de RTVV sin consenso que fijará un marco de gestión que le permita privatizar franjas horarias y reducir la plantilla. RTVV no se sostiene, pero las claves que han conducido a su actual estado no son ajenas a la gestión realizada durante esos años y están reflejadas en las cuentas de resultados consolidados que el ente entrega de forma anual al Síndic de Comptes".
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