El cacerolo "¡Y el gobierno no hace nada!" casi se lleva puesta una alcaldesa peruana

"La alcaldesa de Lima, Susana Villarán, se ha salvado por los pelos de ser la primera máxima autoridad de la capital de Perú en ser destituída de su cargo. Según las encuestas a pie de urna y el conteo rápido de votos, alrededor de un 51% de los limeños ha votado a su favor en un referéndum de revocatoria celebrado este domingo.
Si se confirma lo que muestra el conteo rápido, la victoria de la alcaldesa será amarga ya que todos sus funcionarios serán destituídos y Lima enfrentará en noviembre nuevas elecciones para reemplazarlos.
Ex ministra de la mujer, ex candidata presidencial y activista por los Derechos Humanos, Villarán llegó a la alcaldía de Lima en octubre de 2010 al frente de la coalición de izquierda Fuerza Social y convirtió la reforma del caótico transporte público de la capital y la promoción de actividades culturales y deportivas en áreas públicas en su bandera política. Un año después de que fuera elegida alcaldesa, un pequeño grupo de personas, capitaneado por el abogado municipal Marco Tulio Gutiérrez, comenzó a recolectar firmas en las playas de Lima para destituirla bajo el eslogan 'Susana no hace nada'.
Los miembros del grupo promotor del Sí a la revocatoria eran variopintos y, algunos de ellos, relacionados con el entorno del ex alcalde Luis Castañeda, su antecesor al frente del ayuntamiento. A Marco Tulio Gutiérrez, director de un instituto de gestión municipal que asesoró al ex alcalde, le acompañó en la tarea revocadora José Linares, un pastor evangélico acusado de violación que decía representar a un grupo "pro valores" que ejerce campañas en contra del matrimonio gay. Este experimento político, que en principio no contó con el apoyo abierto de ningún partido, logró su cometido apoyado por algunos medios de comunicación que popularizaron eslóganes que salpicaban los muros de las calles de Lima (como "Lady Vaga").
Sin embargo, en números, la gestión de Villarán había ejecutado en sus dos años de gestión más obras que sus antecesores en el mismo periodo.
Susana Villarán sufrió su principal revés durante el desalojo de un mercado de abastos de la capital en octubre de 2012. La improvisación de este operativo provocó fuertes enfrentamientos transmitidos por TV entre la policía y presuntos grupos de delincuentes contratados por los comerciantes para impedir su desalojo. El saldo fue de cuatro muertos, decenas de heridos y varios días de disturbios.
En la cresta de aceptación del Sí, el partido Aprista del ex presidente Alan García se sumó a los que apoyaban el referéndum, en un intento según los analistas de medir sus fuerzas en la capital de cara a las elecciones presidenciales de 2016.
Mientras el Sí era apoyado por el partido aprista, por el partido del ex alcalde de Lima y por algunos miembros del fujimorismo, el No articuló un movimiento al que se adhirió el partido del ex presidente Alejandro Toledo y una amalgama de artistas, deportistas y personalidades del mundo de la cultura como el premio Nobel Mario Vargas Llosa.
Villarán comenzó a crecer en las encuestas después de entonar un mea culpa por sus errores, entre los que destacó el no comunicar y publicitar sus obras y el no buscar más concertación con otras fuerzas políticas. Paralelamente, el municipio contrató al asesor argentino-brasileño Luis Favre, asesor del presidente Ollanta Humala durante su campaña electoral, y comenzó a difundir una serie de "memes" por el No en internet que se hicieron muy populares.
Mientas el No crecía de forma lenta pero constante, el Sí comenzó a caer en medio de desafortunadas expresiones como "las mujeres dicen no cuando en realidad quieren decir sí", entonada por el portavoz del Sí Marco Tulio Gutiérrez".
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