"Fernando “Pino” Solanas y Elisa Carrió tienen varias cosas en común. Los dos son diputados, odian al gobierno K y son viperinos como demanda la telepolítica. Pero hay algo más: este año, ambos afrontan la posible extinción de los partidos que supieron construir.
La
aritmética electoral es implacable con ellos. En las legislativas de
octubre la Coalición Cívica de Carrió pone en juego las seis bancas que
posee en Diputados y la única que le queda en el Senado. El
descuartizado Proyecto Sur de Solanas, por su parte, apuesta los dos
sillones de la Cámara baja. Entre los que deben revalidar títulos están
los propios Pino y Lilita, quienes, desesperados, pasarían de ser
rivales a compañeros de cornisa. El abismo político es así.
Los
temores de unos y otros no son infundados. De repetir su última
performance electoral, Pino, Lilita y sus partidos no recuperarían las
bancas que ponen en juego, por lo que dejarían de existir en el
escenario parlamentario".Fuente
Ooooootro tema: el acuerdo con Irán habría sido aprobado porque el voto negativo de Lilita no fue computado. Señal, obvio, de que vivimos en una DiKtadura y todo eso.
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