Como era de esperar, Clarín y La Nación protegen a Mauri de cualquier titular catástrofe que habría merecido la misma medida si la hubiera tomado un K: el aumento en el precio del subte es presentado como uno más de los items que conforman un ajuste terrible que se viene sobre la población argentina por parte del gobierno nacional, ya que se acabó la fiesta, y todo eso...
En su tapa, Clarín camufla la exorbitante suba del 127% (no pone el porcentaje) detrás de un supuesto aumento futuro del gas (gobierno nacional), al cual sí le pone porcentaje: 248%. Además, intenta justificar la decisión del gobierno municipal de Buenos Aires al escribir que "es después del traspaso a la Ciudad".
La Nación, menos explícita, admite el tarifazo en el antetítulo, chiquito, mientras que el titular sólo habla de precio también en vez del más gráfico porcentaje, pero no incurre en la maniobra de mezclar el subte con el gas.
Ambos coinciden en que va a haber más aumentos en el año. Lo paradójico es que estas promesas de ajuste (que remiten a los de verdad que se están haciendo en Europa y a nuestra memoria reciente de los 90's y comienzos de los 2000's) conviven en el día a día con noticias de mayores partidas en el "gasto" social. Es un ajuste que expande.
Además, estos días se han comenzado a reestructurar los subsidios por los barrios más pudientes del país. Dicha noticia es presentada como el inicio del ajuste. No pasa lo mismo -en el caso de Clarín es más marcado- con este aumento -no consultado con la legislatura porteña ni tramitado mediante audiencia pública-, siendo el subte uno de los servicios elementales de la vida cotidiana de millones de personas que viven o que van a CABA.
Quizás la diferencia de gradualidad en la defensa que ambas empresas paraperiodísticas le dispensan al niño mimado de la Derecha latinoamericana sean los negocios que unen a Clarín con Macri
El análisis se limitó a las primeras planas de ambos matutinos.
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