Walter Curia: "Después de un largo mes de ausencia, el lugar común es que vuelve una presidenta disminuida. En despachos oficiales se han hecho a la idea de que Cristina alcanzaría la plenitud recién entrado el mes de marzo y que deberemos acostumbrarnos a un Gobierno andando en marchas lentas.
El último informe indica que la Presidenta será sometida a controles neurológicos y cardiológicos secundarios que incluirán un nuevo diagnóstico por imágenes y pruebas pendientes de esfuerzo cardíaco. La información ha sido muy dosificada y del último parte sobresale que en adelante se encargará de difundirla la unidad médica presidencial, gente que ya mostró limitaciones. Sobre estas pocas certezas, mil versiones, entre las que desconcierta un cuadro de depresión profunda. Una fuente de acceso a información en Olivos recordó una caminata reciente de la Presidenta por el parque, lejos de los ojos de los custodios, que la habrían hallado más tarde extraviada y en una crisis de llanto.
¿Cuál es el verdadero deseo de Cristina? Las versiones sobre una salida anticipada dejan de ser temerarias si se atiende a los análisis que preceden a este texto. Hablan de “orfandad”, “ausencia de liderazgo” y “desconcierto”".
Eduardo van der Kooy: "Cristina volverá mañana a la actividad. Desde que su enfermedad la forzó
a recluirse, el Gobierno entró en un paréntesis. En una pronunciada
confusión. A los problemas existentes entonces, políticos y económicos,
se fueron sumando otros. Todos esperan alguna atención. Lo único que no
se detuvo durante la convalecencia presidencial fue el proceso
electoral. Las legislativas sellaron la derrota y marcaron un límite
inviolable y final para su futuro en el poder".
Guido Braslavsky: "Cristina Kirchner vuelve con derrota electoral a cuestas, sin números para la reforma constitucional y la re-re que soñaba el cristinismo, y con horizonte de entrega del poder en dos años. En la Casa Rosada afirman que los principales temas por delante pasan por decisiones económicas que debería adoptar. De lo que se desprenderá en lo político el “teorema de Cristina”: cuanto mejor le vaya en la gestión y si puede conservar la imagen positiva, más capacidad tendrá de incidir en la sucesión en 2015".
Daniel Fernández Canedo: "La jefa del Central integra el bando que se opone al desdoblamiento cambiario junto al vicepresidente Boudou, al ministro Lorenzino y al titular de la ANSeS, Diego Bossio.
En el otro rincón, Kicillof y Moreno, aunque con menos peso relativo ante la ausencia de la Presidenta, impulsan el encarecimiento del dólar para el turismo y lo que ellos puedan considerar importaciones suntuarias.
Los dos bandos están ansiosos para que la Presidenta vuelva y falle en favor de alguno. Como siempre, la última palabra la tendrá la Presidenta. La urgencia la requiere".
Alcadio Oña: "Nadie puede pedirle a la Presidenta que vuelva a sus tareas con el mismo empuje que antes, y mucho menos que hubiese evitado caer enferma. Pero en cierto modo, eso también es parte del problema.
En un sistema radial donde todas las decisiones confluyen en ella, su ausencia es un dato central y por eso algunas resoluciones económicas que urgen siguen en turno de espera. Además de su modelo de gestión, la ayuda muy poco un equipo en el que internas e intrigas son cosas de todos los días".
Tomás Canosa: "Las reservas del Banco Central eran de US$ 43.290 millones en enero de 2013 y el viernes cerraron en
US$ 32.500 millones. La caída estuvo impulsada por los pagos de deuda
externa, importaciones de combustible, el déficit de la industria y
salida de divisas por turismo, e-commerce y retiro de efectivo de los
cajeros del exterior. Una de las versiones que circula por la city
porteña es que el Gobierno implementaría un desdoblamiento cambiario. El
diputado y presidente del Credicoop, Carlos Heller, incluso se
manifestó a favor de una medida en esta dirección. Ramiro Castiñeira,
economista de la consultora Econométrica, aseguró que un desdoblamiento
no resolvería el tema de fondo, que es, según él, el atraso cambiario.
“Lo único que quedó barato en la economía es el dólar, pero esto no se
arregla con una devaluación, sino que tiene que haber un programa”".
Lucía Salinas: "Clarín habló con diversos consultores políticos que analizaron el escenario con el que se encontrará la Presidenta. Algunos distinguen que esta última semana se acentuaron las diferencias entre los ministros. Lo adjudican a la postergación del regreso de Cristina. Hablan también de “un fin del ciclo político del cristinismo tal como lo conocimos”, de “ausencia de liderazgo”, y de sensación de “orfandad y desconcierto” en los últimos días. Entre las voces, también están quienes creen que no hubo mayores cambios y que las internas “no son tan visibles y en todos los gobiernos las hay”".
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domingo, 17 de noviembre de 2013
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3 comentarios:
están a full los muchachos!!!!
escriben y escriben cualquier cantidad de pavadas......siempre algún cacerolo repite el libreto......
Vuelve una presidenta, esperada, respetada, querida; vuelve y al volver deja atrás la preocupación de muchos, preocupación en el buen sentido de la palabra....
Vuelve, claro, y la mierda se agita, vuelve la insoportable, vuelve el grano en el medio de ahí, vuelve la picazón, vuelve el odio que nunca se fue, bah!.
Vuelve, para mucho más bien que mal, pavadita, no?
Animándose a más colores (fin del exclusivo negro), con ley fuerte (Código Civil) para chequear lealteades en el Congreso y asustándolos con la re-re.
Demasiado para los vencidos.
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