Varios intelectuales y referentes opositores consideraron al puesto como una burla al intelecto. La ensayista Beatriz Sarlo consideró que es un cargo inútil por absurdo. El primero que tiene que ponerse incómodo es Forster, afirmó.
Ya cuentan con varias formas de transmitir lo que consideran su versión de la historia nacional, como el Canal público o Canal Encuentro y quieren agregar un instrumento más al presupuesto, señaló la escritora. Y afirmó: No conozco otro país en el mundo que tenga este tipo de Secretaría.
El diputado de la UCR Ricardo Alfonsín comparó a la secretaría con el Ministerio de la Verdad, una entidad ficticia ideada por George Orwell para su novela 1984, en la que el mundo está dominado por el falseamiento de la realidad mediante el control de los medios de comunicación y del lenguaje. Y la diputada del PRO, Laura Alonso, trató a Forster directamente de fascista por Twitter, mientras que el socialista Roy Cortina dijo que el cargo era grotesco".
El Profe Romero El Malo: "Como la realidad es reacia a esa unificación, la cultura nacional debe ser impuesta. En tiempos anteriores, las fuerzas armadas y la Iglesia solían participar de esta cruzada por la unidad de las creencias y del pensamiento. Hoy todo reposa en lo que puedan hacer el Estado y los intelectuales nacionales. El actual gobierno comenzó con el Instituto Dorrego, destinado a promover el revisionismo histórico, y hoy avanza con una secretaría dedicada a unificar y nacionalizar la cultura, cargo de Ricardo Forster.
Previendo que no será tarea fácil ni breve, se le encomienda al secretario la "coordinación estratégica". Una denominación de impronta castrense que le habría gustado a Perón y a Onganía.
Pero a este gobierno sólo le queda algo más de un año. Muy poco para engendrar una cultura nacional, pero suficiente para que algunos trabajadores del intelecto se prendan a la teta del presupuesto estatal, como ya lo vienen haciendo sus colegas del revisionismo histórico".
El locker de Bárbaro: "Ricardo Forster es un fanático del supuesto pensamiento nacional, que vendría a coincidir casualmente con el pensamiento oficial. El oficialismo concebido como el único espacio de la virtud y la democracia. Los discursos de la compañera Presidenta, que la gran mayoría de la sociedad apenas soporta, convertidos en materia dogmática. El primer peronismo fue sectario por necesidad, el último Perón convocó a la unidad nacional. El kirchnerismo retrocede a superados sectarismos de izquierda que amontonan burocracias a cambio de supuestas ideologías.
Nombrar a Ricardo Forster es asumir la condición de secta que no quiere ni necesita dialogar con el resto de los pensamientos vigentes. Parecido a Venezuela y al Ministerio de la Verdad orwelliano, encargado de ajustar la historia para que no contradiga los postulados oficiales; muy distantes en logros y fanatismos del resto de los países hermanos".
Longo: "El periodista Marcelo Longobardi cuestionó la designación del principal referente de Carta Abierta Ricardo Forster como secretario de Coordinación Estratégica para el Pensamiento Nacional del Ministerio de Cultura: “¿Pretenderán ahora controlar el pensamiento nacional?”.
“No cuestiono y hasta me parece bien que Forster ocupe un cargo, pero me llama la atención y me parece sugestivo del nombre del cargo”, señaló Longobardi en su habitual editorial en el programa Cada Mañana, que se emite por radio Mitre.
“¿El va a determinar cuál es el pensamiento nacional, lo va a coordinar entre los diversos pensadores nacionales o va a eventualmente determinar cuál pensamiento es no nacional o antinacional? ¿Pretenderá además controlarlo?, ¿habrá alguna suerte de Biblia respecto de cuál es el pensamiento que debiera tener una Nación?”, agregó.
Y en consecuencia planteó: “Si hay un pensamiento Nacional, significa que es el pensamiento adecuado. Entonces el pensamiento de los demás, ¿es el inadecuado?”".
El irascible Roa: "Forster coordinará sobre una parte del pensamiento, no sobre todo el pensamiento. Pero eso será una liberación para los que no piensan como Forster y para los que piensan que nadie debe coordinar ni decir qué hay que pensar.
Forster es el líder de Carta Abierta, el grupo de intelectuales que ha cumplido los ritos de la obsecuencia kirchnerista: no decir nada de la corrupción y decir de todo de la oposición y la prensa no adicta. Otra paradoja es que su coordinación será estratégica.
El pensamiento reside en transgredir estrategias, a menos que se piense para legitimar a los que están en el poder. Los estrategas calculan; los que piensan, piensan sin calcular para aproximarse a la verdad.
Dictaminar qué entra y qué no entra en el pensamiento nacional es empobrecer el pensamiento nacional. O peor, titular como pensamiento nacional lo que en realidad es el pensamiento de un grupo. Es un inmenso retroceso. Y es lo menos inteligente que se podría haber pensado para promover la inteligencia".
"Ése fue el período más totalitario, con propaganda oficial en los textos escolares y en la cultura", advirtió Sebreli, quien anticipó que a Forster le espera "un papel muy triste".
"Las redes sociales no han dejado de preguntarse burlonamente qué es el pensamiento nacional y si alguien puede considerarse propietario del mismo", observó la socióloga Maristella Svampa. Se declaró sorprendida por la decisión, en el contexto de fin de ciclo del kirchnerismo, cuando "el área tiene que ver más con el largo plazo".
Estimó que la designación puede interpretarse como un "premio -tardío- a la lealtad" de una de las principales voces de Carta Abierta. "Fíjese hasta dónde habrá llegado la lealtad de Forster que incluso apoyó al Gobierno y criticó a Horacio González cuando éste manifestó su desacuerdo por la designación de Milani al frente del Ejército", dijo Svampa, antes de dejar un deseo: "Ojalá esto no se transforme en un nuevo golpe contra el pensamiento crítico".
El escritor Luis Gregorich dijo que "nadie vinculará a Forster con el nazifascismo, pero la idea misma de «pensamiento nacional» resulta sospechosa si no se la define bien". Y añadió: "Lo de coordinación estratégica nos evoca una intención manipuladora y reglamentadora. Para Aldous Huxley, cuando se habla de «democracia auténtica» o verdadera libertad» más bien uno se refiere al autoritarismo o la tiranía. Ojalá Forster tenga suerte y pueda convertir este galimatías en un espacio abierto y plural, sin paternalismos ni especulaciones electorales".
Hernán Lombardi, secretario de Cultura del gobierno porteño, consideró absurda la iniciativa. "Suena a deformación autoritaria intentar que el Estado coordine el pensamiento", observó".
El profesor de voley: ""La idea de pensamiento nacional es una barbaridad, porque el pensamiento es universal. Como decía (Jorge Luis) Borges, nuestra tradición es la entera tradición de Occidente. El que mejor explicó esto fue Karl Marx, que en el Manifiesto Comunista habla de cómo las literaturas nacionales confluían en una gran literatura universal, y de cómo esta pérdida del carácter nacional de la literatura, el pensamiento y la industria causaba hostilidad en los reaccionarios y bárbaros más hostiles al extranjero. Me parece que Marx anticipó muy bien el nombramiento de Forster. Pero peor que esta idea atrasada del nacionalismo del siglo XIX es la idea de la coordinación estratégica del pensamiento, como si el pensamiento pudiera ser coordinado desde el Estado. Acá se acerca a su pretendido rival, al partido militar, que tenía la idea del ser nacional y la historia oficial".
Las empleadas de Gabriel Cavallo: "“Tiene el mismo fundamento que la Ley de Medios”, sostuvo Patricia Bullrich, y aseguró que “Cultura quiere sostenerse en la propaganda gubernamental, permanente, con fondos públicos”.
“La idea original la dio La Cámpora, en las escuelas, otorgándole culto permanente a la figura de Néstor Kirchner, y reafirmando los valores autoritarios que este gobierno pregona”, definió la presidenta de la Comisión de Legislación Penal.
En la misma dirección, Laura Alonso afirmó que “el Gobierno va en contra de los valores democráticos de nuestra sociedad, donde suponemos tener libertad de elección y pensamiento. Ese mismo pensamiento es al que el kirchnerismo apunta para seguir adelante, llevándose todo puesto. La Secretaría de (Ricardo) Forster es la cocina de la propaganda kirchnerista”.
A su vez, el diputado Ricardo Alfonsín dijo que espera que al Gobierno “no se le ocurra también crear la Policía del Pensamiento, y que su director no termine siendo algo así como el tristemente célebre señor de las tijeras de las dictaduras”".
La cloaca de Fonte: "El filósofo Ricardo Forster fue nombrado a través del decreto 837/2014, publicado hoy en el Boletín Oficial con las firmas de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, y Parodi. Su sueldo se deduce de lo cobrado en mano por otros cargos de similar rango en la categoría de "secretario de Estado" y según algunos trascendidos rondaría los 40 mil.
Forster llega a este cargo luego de no acceder a la banca de diputado nacional por la que peleó en las últimas elecciones legislativas de octubre de 2013.
El nombramiento de Forster no fue el único que se publicó hoy en el Boletín Oficial, ya que el Gobierno también designó como secretario de Políticas Socioculturales a Franco Vitali, un joven camporista proveniente del ala universitaria de la agrupación liderada por Máximo Kichner, Andrés Larroque y Eduardo de Pedro, entre otros. El funcionario, que hasta ahora ocupaba el cargo de subsecretario de Políticas Socioculturales, es hijo del fallecido ex director de la Biblioteca Nacional Elvio Vitali, quien además fue militante histórico de la Juventud Peronista y fundador de la Librería Foro Gandhi, según consignó DyN.
En tanto, el Gobierno nombró al frente de la Secretaria de Gestión Cultural del Ministerio a Sebastián Schonfeld, otro camporista que se desempeñó en el Consejo Asesor de la Televisión Digital Terrestre y trabajó en la producción musical del desfile artístico-histórico del bicentenario. Otro de los dirigentes de la agrupación militante oficialista que accedió a un cargo en el Ministerio de Cultura es Emiliano Gareca, un abogado que estará a cargo de Subsecretaria de Promoción de Derechos Culturales y Participación Popular".
La BBC de la tía Bety: "La creación de una secretaría "para el Pensamiento Nacional" y la designación de un militante kirchnerista para liderarla generaron mucho malestar en los sectores más críticos del gobierno, quienes compararon la secretaría con el Ministerio de Propaganda e Información del nazismo, que dirigía Joseph Goebbels.
Otros, trazaron paralelos con Venezuela: "No tendremos Ministerio de la Felicidad pero hay Secretaría del Pensamiento", resaltó un usuario de la red social Taringa.
Muchos cuestionaron la función del nuevo cargo. A través del hashtag #PensamientoNacional (que fue trending topic en Argentina), llovieron las críticas y los chistes en la red social Twitter.
"Big Brother is watching you" (el Gran Hermano te vigila), rezaba un cartel con la cara de Forster que circuló en el sitio.
"Si llegas a pensar en inglés corresponde que pagues un 35% adicional", bromeó otro tuitero, en referencia a la tarifa que pagan los argentinos por sus gastos en el exterior".
El entrevistado Zuleta: "Desde que asuma, este experto en Walter Benjamin deberá esmerarse para que no le atribuyan intenciones autoritarias, algo de lo que siempre tienen que disculparse los gobiernos peronistas.
Forster fue candidato a diputado nacional por la Capital en las últimas elecciones e integra el grupo Carta Abierta que reúne a kirchneristas no pejotistas identificados con el trabajo de la docencia. Son en su mayoría -si no todos- empleados del Estado. Por eso debió aclarar, antes de asumir, que el sueldo que percibirá como secretario de Estado es "inferior" a sus actuales ingresos como académico. Nadie había echado mano anoche de su declaración jurada, pero en el nivel de secretario de Estado el salario es superior al de diputado nacional, soldada que está por encima de los puestos docentes o de investigadores que cobran horas-cátedra y por proyectos de investigación. No debió mencionar el tema: desafiar a la lupa fiscal es sólo para expertos y estamos en temporada de pirañas.
La designación es un mensaje claro de Cristina de Kirchner hacia el peronismo: el coordinador del pensamiento nacional será un hombre de otras filas, un "entrista" dirían en los años 60. Una manera de maltratar quizás a los intelectuales del peronismo, que es también otra tradición nacional".
El agente Sanz: "Hay quienes festejaron la iniciativa —los menos— y quienes la calificaron iniciativa como algo negativo —los más—, en el marco del avance del “relato oficial” en los últimos años.
En ese mismo contexto, hay quienes recordaron la emblemática obra “1984” de George Orwell, donde aparecía la figura de una omnipresente “Policía del Pensamiento”.
Por caso, la obra relata la trágica y conmovedora historia de Winston y Julia, quienes tratan de escapar de un sistema donde la intimidad y el libre pensamiento están prohibidos.
¿Algún parecido con la realidad actual? Aparentemente, no. Pero en las redes sociales, principalmente en Twitter, ello se ha hecho carne.
Obviamente, Orwell no pensó en el kirchnerismo a la hora de escribir su libro —lo hizo en el año 1947—; tampoco es creíble que el oficialismo actual base sus decisiones en esa obra de ficción.
No obstante, no deja de ser curioso el parecido que se da entre algunos pasajes del libro y la realidad actual. Pero, ¿no es acaso similar 1984 a varios tramos de la propia historia argentina o internacional?
Hablando de similitudes: al descubrir que los "miembros de la resistencia" forman parte de la maquinaria represora, los protagonistas son encerrados por la Policía del Pensamiento y sometidos a tortura en el Ministerio del Amor. ¿Tal vez una referencia a Luis D’Elía, que pidió hace poco amor, amor y más amor?".
El Instrumento de Viento: "Igual que la Dictadura, el decreto de la Cultura llama a fortalecer el "ser nacional".
El discurso de la última dictadura militar tomó la figura y la defensa del "ser nacional" como uno de sus caballitos de batalla a la hora de justificar la represión contra la "subversión marxista y apátrida". Cualquier empresa de manejo de archivos audiovisuales, si quisiera, podrá encontrar fácilmente este tipo de discursos en el período 1976-1983.
El flamante ministerio de Cultura, con Parodi, Forster y encumbrados funcionarios salidos del semillero de la agrupación La Cámpora en la conducción, tiene todo el aspecto de parecerse al Ministerio de la Batalla Cultural".
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