viernes, 17 de mayo de 2013

Cada vez menos para que Clarín se adecue a la Ley de Medios


No fue el 7D, pero parece que en cualquiera de estos días la Corte Suprema de Justicia de la Nación dictaminará lo obvio, sólo retrasado por el enorme poder real que todavía conserva el grupo mediático-empresarial más grande que haya conocido la historia argentina.
Las señales son múltiples: una radicalización del discurso anti K que puede observarse en sus varios centenares de medios a lo largo de todo el país; las diferentes acciones que mandó a tomar por parte de sus legisladores; la inversión para cooptar a operadores que hasta ayer despotricaban contra todas sus prácticas; una nueva apuesta por rejuntados electorales condenados al fracaso; apoyo logístico-operativo a grupos de ciudadanos descontentos con el gobierno nacional; el regreso de call centers a las redes sociales para imponer hashtags de hasta programas insignificantes; batería de mamarrachos judiciales, a cargo de Macri, y próximamente de De la Sota, que aprovecharía la ocasión para tomar un poco de aire y desviar el foco de discusión en la provincia, justo cuando su gobierno tambalea en medio de denuncias de corrupción, renuncia de funcionarios cercanos, deficiente gestión y nubarrones electorales.
Precisamente en Córdoba, por estos días, emergió un nuevo caso (el de la docente echada de un colegio semi-privado por apoyar la Ley de Medios) en el que se pueden observar condensados varios de estos elementos propios de ese relato anti K que buscará en agosto y octubre obtener lo que en esta semana el mismo Clarín se animó a plasmar en algún título: una mayoría parlamentaria opositora, que pueda extenderle -una vez más- el plazo que irremediablemente se agota.
A la vez, el íntimo amigo del gobernador, el denunciado ministro de Transporte Dante Heredia, daba indicios en su defensa en la Unicameral provincial de lo que se viene: ataque a todo lo que sea K, que se plasmará en las próximas elecciones con slogans que extorsionarán al electorado con un divisionista "Córdoba o Cristina", y victimización a lo Macri cuando algo comprometa a la ya deshilachada gestión delasotista.
El discurso del consenso y diálogo ya quedó atrás hace tiempo, y Clarín necesita mucho más que atacar una media docena de antenas de TV Digital gratuita. La urgencia del ordenador de la agenda opositora se impone y sus melones se acomodan servilmente. Una vez más. Luego, si fallan, sólo les quedará romper todo.

ACTUALIZACIÓN (19,30 Hs)
Y renunció Heredia, tercer funcionario delasotista en dejar su cargo en sólo 7 días.

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