Clarín, en contra del control ciudadano de los precios

Hoy domingo, los columnistas del diario se despachan contra la iniciativa, sin dar cuenta del Apagón de Consumo del viernes (como tampoco lo hicieron con el del viernes anterior).
Recuerden que la realidad no sólo se puede tapar sino que puede hacerse tapa ("El gobierno es un inútil a la hora de controlar los precios").
Oña: "Es evidente que Cristina Kirchner le ha tomado cariño a la palabra empoderarse, de tan seguido que la usa, aunque a los destinatarios les resulte un término extraño. Escarbando en el sentido que ella le da, podría ser asimilada a usar el poder de consumidores o a hacerse fuertes.
Seguro que al Gobierno le vendría bien que la gente se empodere, tal como se han empoderado militantes de La Cámpora, así a varios todavía les cuesta entender de qué manera deben vigilar que se cumplan los Precios Cuidados. Pero no se trata de un trabalenguas, sino de cargar sobre especuladores, empresarios y comerciantes, a veces con motivos.
Especialistas en comunicación sostienen que el kirchnerismo ha logrado instalar su mensaje y que va ganándole la pulseada a sus enemigos declarados. Hay un problema, sin embargo: que a la gente no le alcanza la plata, que eso la enoja mucho y que no es responsable de lo que pasa.
El Gobierno parece estar dispuesto a admitir la inflación verdadera. El problema es que no dijo cómo piensa enfrentarla, porque los Precios Cuidados lucen a respuesta precaria. Mientras tanto, los salarios van a la retaguardia y la recesión asoma la cabeza por todas partes".
Moreno: "De golpe y porrazo parece que se nos acabó la fiesta de milanesas y heladeras y refrigeradores para todos. Nos quedan los “precios cuidados” de alimentos y artículos básicos, a los que se l es da por jugar a las escondidas en las góndolas de los supermercados. Eso sí, debemos estar muy atentos: la agrupación paragubernamental Unidos y Organizados nos mostró los rostros de algunos de los especuladores que meten mano a nuestros sueldos, violando los pactos de precios que habían jurado mantener inmóviles. Y que son los verdaderos culpables de nuestras desdichas. Toda una invitación para que hagamos tronar el escarmiento".
Van der Kooy: "Cristina quiere que los jueces ayuden a controlar los precios y evitar un desmadre inflacionario. ¿Cómo? Con fallos, según ella, que protejan los derechos de los consumidores. Una mirada digna de Lita de Lázzari, la consejera de TV en las épocas de Domingo Cavallo. Para la Presidenta, el alza constante de los precios debería combatirse con voluntad política (la campaña de “precios cuidados”), con la colaboración de los jueces, persiguiendo a los agiotistas (término que extrajo de la lectura de un discurso de Juan Perón de 1953) y silenciando a los medios de comunicación. De lógicas económicas, nada. ¿Nunca se habrá preguntado por qué motivo Néstor Kirchner gobernó casi sin inflación sus cuatro años?".
Otros eran los tiempos en los que el Instrumento de Viento apoyaba sin miramiento esa bella libertaria experiencia ciudadana de los cacerolazos. Si hasta sus señales de cable publicaban y repetían los lugares donde la gente se podía juntar para protestar contra la DiKtadura... (Además de fondear a sus organizadores. Espontáneos, claro).
Próximos targets: Miguel Bein -¡obvio! ¿Cómo se va a atrever a deschavarlos así?- y Robertito -hoy Clarín Espectáculos le infla un competidor-. Se se se (a lo Lilita).

ACTUALIZACIÓN (23/02/14, 12 hs)
¡¡¡Y llegó nomás!!!
El Sirviente ataca a Robertito