lunes, 6 de agosto de 2018

Periodismo, corrupción y doble vara: de "aportantes truchos" de Vidal a "cuadernos K"

"Yo quiero mucho a LaVoz.com.ar. Allí aprendí a hacer periodismo, pero después de leer este interesante resumen de Sergio Carreras sobre la historia de Electroingeniería me dan ganas de decir que lamentablemente faltan varios detalles que está bueno conocer para entender cómo funcionan las empresas periodísticas a la hora de difundir o no un hecho de corrupción.
Entiendo que este es un posteo para periodistas, pero sería bueno que lo lean todas las personas posibles. Así, quizás, se pueda analizar el silencio cómplice de La Nación, Clarín y LaVoz.com.ar en relación al financiamiento trucho de la campaña de María Eugenia Vidal, que se contradice con el énfasis con el que ahora LaVoz.com.ar difunde la denuncia por la obra pública K.
No estoy acusando a nadie y menos a Sergio que hizo y hace bien su trabajo sobre este tema, pero no seamos hipócritas y contemos cómo funcionan las empresas periodísticas para ver de qué mecanismos somos víctimas sus trabajadores.
En aquellos tiempos -de los que habla Sergio en este resumen- Clarín, ya con control sobre LaVoz, tenía una excelente relación con Kirchner, y el diario cordobés, una excelente relación con José Manuel De la Sota. En ese contexto, era muy difícil escribir en LaVoz.com.ar sobre Electroingeniería. Lo sufrió Sergio, lo sufrieron otros y lo sufrí yo.
Cuento dos anécdotas. La primera puede ser una tontera, la segunda es más compleja.

La tontera fue cuando conté que en una de las segundas 100 escuelas construidas por Electroingeniería para el gobierno provincial (el Ipem del pueblito, en Salsipuedes) no se habían hecho las cloacas y, sin embargo, se la había inaugurado con bombos y platillos con la presencia del gobernador y el ministro de Educación. La nota salió en la sección Gran Córdoba y se generó un escándalo. Al día siguiente, el mismísimo Carlos Jornet, director del diario, le pidió al 'Cabrito' Toledo (un admirado compañero) que desmintiera mi información en la tapa del diario. La razón era que Electroingeniería habló con el director del diario y le “aseguró” (con ellos como única fuente) que esa información “era falsa”. Un mes después, el 'Cabrito' -nunca Jornet- me pidió disculpas debido a que la escuela efectivamente tuvo que dejar de funcionar porque ¡no se habían hecho las obras de cloacas!

Un tiempo más tarde, cuando yo ya trabajaba en Día a Día, hicimos una investigación con dos colegas (que no nombro porque siguen en el diario y no sé si quieren decir lo que yo sí puedo) hicimos una investigación sobre la empresa Electroingeniería e identificamos una obra en la que se la vinculaba a un caso de corrupción -y, qué casualidad, de coimas en la obra pública- cercano al escándalo Skanska.
Nuestra investigación fue excelente (lo digo porque fue tan contundente que ni siquiera se animaron a desmentirla y fue luego “usada” por el 'Turco' Asís y hasta por el tránsfuga de Majul que lo hizo sin citar la fuente).
Por eso, como no podían desmentirnos, la solución se encontró después de una negociación entre “empresa y empresa” dejando de lado a los periodistas. Así, de un día para el otro, Día a Día comenzó a editar un suplemento (dos veces por semana) que tenía un único financiamiento (¡de Electroingeniería!) y que nunca vendió nada. ¡El suplemento en cuestión era de Geografía! Y después de su salida nunca más hubo lugar para publicar algo serio sobre nuestra investigación.
Por último: esto no es un ataque a los compañeros del diario. Todo lo contrario. Festejo que Sergio Carreras pueda publicar esta información que existe desde hace años y no dejaban que la publicase más que a cuentagotas antes, pero debemos saber que el periodismo -y los periodistas- muchas veces están atados a los “negocios” de las empresas a las que trabajamos, que deciden darle bola a un caso de corrupción mientras deciden esconder otros, como el de María Eugenia Vidal ahora.
Por eso me permito especular que (claramente sin que los periodistas que las escriben lo sepan) debemos saber que si hoy se le puede “pegar” a Electroingeniería en LaVoz.com.ar por este supuesto hecho de corrupción, es porque Electroingeniería no puede “arreglar” las cosas con un suplemento o porque alguien (¿quién será?) está pagando mucho más que lo que vale un suplemento de ese tipo para que estas notas salgan.
La misma pregunta cabe hacerse en relación al caso Vidal y el financiamiento de su campaña que publicó El Destape.
Finalmente les advierto a los compañeros de LaVoz.com.ar que no hablen de este posteo por sus correos de la empresa porque también me acuerdo que, en aquellos días, nos enteramos de que algunos compañeros de LaVoz.com.ar que nos mandaban correos con info sobre Electroingeniería desde sus correos de La Voz a los nuestros de Día a Día, se dieron cuenta de que un director accedía a sus correos privados sin permiso y se enteraba de qué información nos pasaban.
Soy trabajador en un oficio que muere. Las empresas creen que somos “un costo” y no “una fuerza de trabajo”. Por mi parte, lamentablemente no sé hacer otra cosa. Hace tiempo soy consciente de que no voy a trabajar en los medios de Electroingeniería y que por estas cosas tampoco voy a conseguir trabajo en los medios de Clarín.
Al menos me queda la posibilidad de decir lo que pienso hasta el final".
Periodista de Radio Universidad (Córdoba)
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