Las idas y vueltas de Massa y De la Sota

"Las encuestas le marcaron un retroceso que puso en alerta a su equipo de asesores. El candidato presidencial Sergio Massa está padeciendo el efecto que muchos le advertían después de su resonante triunfo sobre el kirchnerismo en las elecciones legislativas bonaerenses del año pasado: es difícil mantenerse arriba en la preferencia de la sociedad cuando se hace campaña desde el llano.
En el búnker del referente del Frente Renovador analizan cambios en la estrategia de campaña, que podrían incluir la relación con José Manuel de la Sota, otro de los aspirantes presidenciales, con quien el ex intendente de Tigre piensa construir un nuevo espacio político.
Pero se sabe que, por el momento, el mandatario cordobés está convencido de ser candidato presidencial y pretende enfrentar a Massa en las primarias de 2015.
Como siempre ocurre, cuando los números de las encuestas no dibujan una realidad auspiciosa como el año pasado, comienzan los roces en el equipo. Las versiones indican que habría diferencias con Hugo Haime, el principal encuestador y asesor de Massa.
Las encuestas cualitativas estarían indicando que 
Massa es visto como un candidato solitario, sin un gran equipo técnico y con una escuálida estructura política, salvo en la provincia de Buenos Aires".
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"La relación entre el gobernador José Manuel de la Sota y el diputado nacional bonaerense, Sergio Massa, parece ir de mayor a menor luego que el ex intendente de Tigre plantara dos veces al cordobés, lo que provocó grietas en la relación, que lejos están de restablecerse.
Invitado el “tigrense” a un encuentro que De la Sota organizó con la Democracia Cristina (DC), fue el gran ausente; igual que el plantón que le propinó cuando se realizó el desfile del 9 de Julio en Marcos Juárez, con gran fanfarria para poner el marco político a un futuro acuerdo para ir por dentro de una misma fuerza en las Paso presidenciales.
Massa estaba ese día en San Pablo mirando la semifinal de Argentina vs. Holanda, y de esta manera eludió la invitación que sus asesores le desaconsejaron.
La verdadera historia de la esquiva relación entre Massa y De la Sota tiene variados condimentos. Para empezar, el “tigrense” no tiene un gobernador de provincia para lucir como alidado, y la figura de De la Sota allí cobra relevancia y es la carta fuerte con la que cuenta el delasotismo.
Sin embargo, los asesores de Massa le indican que mientras este argumento es verídico, real y tangible, también son las encuestas que en la provincia de Buenos Aires le hacen perder apoyos a Massa en virtud de tener catalogado al actual gobernador cordobés como un representante de la vieja política".
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"En su esquema original, Massa apostaba a potenciar las Paso a nivel provincial con la disputa por la gobernación, pero luego empezó a virar hasta imaginar una primaria en el Frente Renovador en la que tendría enfrente a José Manuel de la Sota.
El plan de los massistas es que el cordobés sea una especie de sparring consentido que le permita mostrar peronismo, sumar en el centro del país y ensanchar el espacio del Frente Renovador".
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"José Manuel de la Sota incrementará su presencia en otros distritos, en su ambición de anotarse en la carrera presidencial.
Entre los asesores del mandatario provincial hay visiones distintas respecto de la estrategia nacional. Los consultores porteños recomiendan que haga público que aspira a suceder a la presidenta Cristina Fernández y que incremente su presencia en Capital Federal y el conurbano.
En cambio, los dirigentes del peronismo cordobés tienen una postura más conservadora y advierten que si el gobernador se lanza de lleno a la campaña nacional, esto puede impactar en la gestión provincial".
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"El gobernador José Manuel de la Sota repite a cada momento que su prioridad es gobernar Córdoba. Sin embargo, hay un grupo de dirigentes políticos y asesores que conforman un reducido grupo de su confianza, que desde hace meses está trabajando para su candidatura presidencial.
El principal operador político delasotista en el orden nacional es Carlos Caserio, diputado y presidente del PJ cordobés.
Como el Congreso es la principal caja de resonancia política, el dirigente del departamento Punilla es quien lleva adelante las negociaciones con el sector de Sergio Massa, otro aspirante presidencial, con el que De la Sota podría compartir un mismo espacio, para no dividir el voto del peronismo anti-K.
Por su origen bonaerense, Caserio también tiene aceitados contactos con dirigentes de la provincia de Buenos Aires.
El diputado mantiene diálogos con dirigentes que responden al gobernador Daniel Scioli, quien hoy está parado en la vereda del peronismo oficialista.
Aunque De la Sota no descarta que en algún momento el gobernador bonaerense rompa con el gobierno nacional y puedan sentarse a negociar un acuerdo electoral para 2015.
Otro dirigente que trabaja en Buenos Aires para De la Sota, es el exministro de Gobierno, Jorge “el Zurdo” Montoya.
El también exdiputado nacional integró durante muchos años la mesa chica del delasotismo, pero cuando el gobernador dejó el poder en 2007, hubo un distanciamiento personal y político entre ellos. Entonces, Montoya comenzó a trabajar para el kirchnerismo.
El año pasado, De la Sota limó sus diferencias con Montoya, quien retornó a trabajar a su lado, gracias a su amplia agenda de contactos con los principales dirigentes y funcionarios kirchneristas.
En el Centro Cívico aseguran que Montoya fue el principal mediador para acercar a De la Sota con el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, en diciembre pasado, luego de la crisis política que produjeron los saqueos en la capital provincial.
Si bien no integra el grupo íntimo del delasotismo, Juan Schiaretti es otro de los fogoneros de la candidatura nacional del mandatario provincial.
Por su condición de exgobernador, Schiaretti tiene buen vínculo con dirigentes del PJ y de otras fuerzas políticas. Además, el actual diputado es el principal interesado en que De la Sota tenga proyección nacional, ya que aspira a sucederlo en 2015.
Aunque no integra formalmente este grupo de trabajo, Adriana Nazario, presidenta de la Fundación Banco de Córdoba, participa en las decisiones políticas sobre el futuro político de su pareja, el gobernador.
En Buenos Aires, trabajan para De la Sota la diputada nacional Claudia Rucci (hija del asesinado sindicalista José Ignacio Rucci) y Julio Bárbaro, quien integra un denominado club político, que respalda la candidatura del cordobés.
Además de la actividad política, la tarea de instalación de la candidatura pasa mucho por la cuestión mediática. En ese sentido, su hija mayor, Candelaria De la Sota, que es periodista, es quien gestiona espacios en los medios nacionales.
En esa tarea también colabora el consultor Guillermo Seita, quien trabajó y es amigo personal de Schiaretti, pero ahora colabora con De la Sota.
Seita es uno de los titulares de la consultora Managment y Fit, pero tiene excelentes vínculos con los medios de comunicación porteños y gestiona para conseguir espacios para el gobernador.
La consultora Aresco es hoy la principal asesora y responsable de las encuestas en las que confía De la Sota. Es liderada por Julio Aurelio, un reconocido profesional a nivel nacional. En estos momentos, Juan Manuel Aurelio (h) es quien lleva adelante la relación laboral con el delasotismo.
Otras voces muy escuchadas por De la Sota a la hora del análisis del escenario político nacional son las del consultor Heriberto Muraro y Lautaro García Batallan, que asesoran al mandatario cordobés.
Con su acostumbrado bajo perfil, el equipo nacional delasotista tiene un referente indiscutido, el empresario Horacio Miró, histórico hombre de confianza del gobernador".
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