domingo, 2 de diciembre de 2012

El Relato AntiK, en el último domingo antes del #7D

Todo está más mal que nunca (¡qué manera de hacer plata la consultora del Colo, ¿no?! Ni a encuestadores necesita pagarle...) Ya la popularidad de CFK es hípernegativa, todos quieren hacer un nuevo cacerolazo (el 24D estaría bueno. No sé... Tiro la propuesta. ¿Qué, mi opinión no vale?), el 7D no va a pasar nada (Perfil en estos días ya cubrió todas las posibilidades así que cualquiera que pase ¡la va a pegar!), Luisito Investigador va a sacar un libro sobre su ex enemigo acusado por él de recibir coimas de la Side Jorge Lanata... ¡¡¡el 7D!!! ("Por cuestiones de pura coincidencia", aclara, y nadie dudaría en no creerle). No es oportunismo, es un aporte a la investigación periodística objetiva e independiente. Ah, no, es una autobio---, perdón, una biografía de Georgie (¡candidato a presidente!, para éxtasis caceroludo)...
Y bueno, ¡¡¡lo que son las plumas hoy, este último domingo que tienen para detener el curso de la Historia!!!
Viau: "Son esos mismos allegados a la notaria los que dicen haberla escuchado relatar un dramático incidente sucedido en la madrugada del 21 de noviembre, cuando sonó su teléfono y del otro lado una voz le solicitó que concurriera de inmediato a la residencia de Olivos porque su amiga, la Presidenta, se encontraba sumida en una severa crisis nerviosa. La había desencadenado, le anticiparon, la noticia del fallo adverso del juez Thomas Griesa ordenando pagar el cien por ciento de lo adeudado a los bonistas que no entraron en la reestructuración de la deuda. El emisario de la mala nueva había sido Carlos Zannini, quien a su vez acababa de recibir el alerta del ministro Hernán Lorenzino, a cuyo correo electrónico llegó el dictamen en inglés y –en un gesto de cortesía– también traducido al español.
La Presidente que, dicen, estaba a punto de retirarse a descansar se llenó de furia. Salió al parque de la quinta y, bajo la lluvia y llorando, clamó al cielo: “¿Por qué me dejaste este quilombo? ¿Qué me hiciste?”, habría repetido mojada, embarrada y, según las versiones, negándose a regresar al interior de la casa. Habría sido entonces que se resolvió convocar a la escribana Cascales. En efecto, la presencia de ésta en Olivos habría tenido el efecto de contención afectiva que la Presidente necesitaba".
Castro: "Sin una Justicia independiente no hay República. Este es el contexo en el cual se entra a la semana decisiva que lleva al 7D, a la que el Gobierno ha presentado como una fecha en la que se refundaría la Argentina. En la Corte hay quienes esperan que el juez Horacio Alfonso emita su veredicto esta semana. Otros lo ven dudoso y piensan que eso ocurrirá después de la feria judicial. De todas maneras, los que conocen lo que se dice en los pasillos ubican al juez como cercano al Gobierno y, por lo tanto, descuentan que su fallo será adverso a Clarín. Ese fallo, sea cual fuere su contenido, no será firme y, por ende, dará pie a una apelación que llegará inexorablemente a la Corte. Por lo tanto, el 7D nada debería suceder. Sin embargo, en la Corte hay quienes creen que el Gobierno no respetará esta premisa elemental de cualquier Estado de derecho y actuará de oficio, procediendo a dar comienzo al desguace del Grupo Clarín. De ser así, la Presidenta habrá visto concretado su anhelado sueño de destruir TN, uno de los objetivos clave de la Ley de Medios. Será ése, además, el momento en el que el Gobierno habrá dado un paso más en su cruzada por hacer de la Argentina un país lo más parecido posible a la Venezuela de Chávez".
Morales Solá: "El cristinismo no recibió bien las decisiones de los jueces supremos sobre el caso Clarín. No lo dice, pero lo insinúa. La Corte pidió acción a los jueces. Es precisamente lo que el Gobierno no quería. Prefería el limbo jurídico. La interpretación del 7-D sería sólo suya. La que importa. La que tiene el peso del Estado.
Kirschbaum: "La Corte, esta semana, ha dicho con claridad en la presentación del Grupo Clarín que si no hay fallo de fondo –decidir sobre la constitucionalidad de dos artículos de la ley de medios– antes del plazo puesto por ella misma sobre la cautelar en vigor (7 de diciembre) habrá denegación de justicia. Pero el fallo sobre la constitucionalidad está en primera instancia y se supone que el juez tomará al menos un mes para decidir. La expectativa, entonces, está en el recurso de amparo que está en la Cámara y que ya fue rechazado en primera instancia. Si no hay ningún fallo, que es lo que el Gobierno busca, ¿se conformaría la figura que plantea la Corte de ausencia de justicia? Y si hay un fallo desfavorable, ¿el Gobierno lo respetará? No es inopinado preguntarse esto porque ya hubo fallos de la Corte que el kirchnerismo no ha cumplido (reposición del fiscal en Santa Cruz y publicidad para la editorial Perfil)".
Eliaschev: "Prevalece en la Argentina una mezcla letal de mentira y chapucería. Farsantes, mitómanos y brutos mienten por diferentes razones, pero juntos son dinamita. Se ve todos los días en una sociedad delirante y turbo-recargada, ebria de fintas, plagada de imposturas y descompuesta de excesos".
Van der Kooy: "Cristina posee otro pensamiento. Que esa oposición se debilitará en la medida en que progrese la aplicación de la ley de medios que apunta a desguazar y condicionar a las empresas periodísticas que no le responden. A esa dirigencia opositora se le han ido cerrando las puertas de la cadena oficial de medios estatales y paraestatales. Lo mismo le sucede a Hugo Moyano y a los jefes del gremialismo opositor.
Con la oposición disminuida y los medios críticos cercados, la Presidenta creería despejado un tramo del camino hacia su posible perpetuación. Aunque antes debería concluir también su labor de acorralamiento contra el Poder Judicial".
La Nación: "Es evidente que, detrás del declamado objetivo oficial de asegurar el pluralismo de voces, se esconde el propósito del oficialismo de castigar a un grupo mediático con el que tiempo atrás se sentía muy cómodo por su adhesión a una línea editorial contraria al pensamiento oficial.
Se torna necesario entender que la libertad de expresión no es ni puede ser una concesión generosa de parte de los gobernantes, sino un precepto constitucional que hace a la esencia de nuestra República. Y que de la Justicia dependerá que esta ley de medios no termine convirtiéndose en un simple instrumento al servicio de un proyecto tendiente a debilitar las voces disidentes y a consolidar la colonización mediática por parte del kirchnerismo".
Abraham: "El 13S salieron a la calle todos los que no consiguieron pasajes para viajar a Miami. El 8N salieron otra vez acompañados por más rubios y algún castaño. El 20N se enojaron los morochos. Se viene el 7D, el desguace patriótico de la corpo. El 15D (o el 27F) le mostramos la cruz de plata al espantado vampiro.
Repasemos, saquemos una hoja: Malvinas, Repsol, Clarín, Moyano, Scioli, Lanata, los narcosocialistas, Griesa…  ¿Y Macri?...". 
Moreno: "Algunos ya la llaman La Década Perdida. Es que nunca en una centuria la Argentina creció tanto y tan continuadamente como en los últimos diez años. Sin embargo la sociedad hoy se enfrenta a los mismos problemas que en la época que emergía de los escombros del 2002. Y a otros de reciente manufactura.
A estos diez años también podrían denominárselos como la Década de las Palabras. O la del Verso. Porque fue intoxicada por la retórica oficial.
Ahora, con otro torrente de palabras, anuncian la epopeya de terminar con el Grupo Clarín y, ya que estamos, con la libertad de expresión. Como si este Clarín constituyera un importante problema en la Argentina.
Sin embargo, se ven en la necesidad de intentarlo, aunque pisoteen derechos, libertades y a la Justicia, de paso.
Porque desde Clarín -como desde los escasos medios que son independientes del gobierno- se sigue dando información. Y esos datos demuestran, con la espesa contundencia de los hechos, que este relato, glorificadamente épico, es sólo y puro cuento".

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