jueves, 4 de octubre de 2012

Los servicios de la CNN a los dictadores árabes pro-norteamericanos

"En medio de una violenta represión de protestas populares en Bahréin, el gobierno de este país paga a la cadena CNN para recibir una cubertura de los acontecimientos favorable, según una ex reportera de este canal, despedida luego de este incidente.
Amber Lyon asegura que la monarquía pagó a la cadena donde trabajaba para que ésta elaborase un reportaje favorable y que un documental que había filmado ella fuera censurado por su compañía.
El documental fue rodado hace seis meses y publicado en EE.UU., pero nunca en la CNN Internacional, hecho que hizo sospechar que los directivos de la cadena habían dado carpetazo a la historia.
En una entrevista a RT, Lyon contó que empezó su investigación para el reportaje cuando se le acercaron empleados con “decenas de años de antigüedad en CNN Internacional” y le dijeron que pasa algo extraño y que debería investigarlo. “Entonces tuvimos la impresión de que el documental había sido censurado porque Bahréin era un cliente de la CNN. En realidad Bahréin está pagando a la CNN por contenido que dé una imagen favorable de Bahréin. Incluso cuando la CNN alega que sus publicaciones no dependen de Bahréin, este último podría influir en ellas. Y esto lo demuestra la historia con el documental sin publicar y la constante lucha que llevaba a cabo en la CNN para realizar una cubertura de Bahréin, una cubertura certera de los abusos de derechos humanos cuando estuve allí”, explicó.
Compartiendo su experiencia en la cadena estadounidense, la reportera relató: “Logramos zafarnos de nuestros guardaespaldas e ir a un par de aldeas donde pudimos ver aquellas atrocidades: pacientes ensangrentados huyendo de los hospitales, varios conductores de ambulancia estaban siendo golpeados. Mientras salíamos de aquellos pueblos, nos detuvieron violentamente las fuerzas de seguridad. Eran unas 20 personas en uniforme y llevaban fusiles automáticos. Querían borrar todos los vídeos que teníamos. Afortunadamente, la productora y yo conseguimos esconder algunos discos en el sujetador y así nos fuimos de Bahréin con este material. Imagínese la sorpresa que se llevó Bahréin cuando se enteró de que este material lo iba a emitir la CNN. Enseguida, después de su publicación, empezaron las llamadas telefónicas, quejándose de mí y tratando de retirar mi reportaje de la emisión”.
Según Lyon, la CNN, cadena que se autocalifica de bastión del periodismo de excelencia e imparcial, “está creando esencialmente lo que algunos definen como “comerciales informativos para dictadores (…) Con ello se violan todos los principios éticos del periodismo, puesto que en este caso nos convertimos en protectores de estos gobiernos”.
La periodista citó entre otros 'clientes' de la CNN al gobierno de Georgia. “Estamos bajo una fuerte presión a la hora de criticar lo que está pasando en Arabia Saudita y Bahréin, pero ustedes podrán ver reportajes que demonizan a Irán y Siria a cualquier hora del día (…) A muchos de nosotros, los periodistas, nos preocupa que nos estemos metiendo en un 'segundo Irak', pero esta vez se tratará de Irán”, concluyó".
Fuente
"El gigante de las noticias CNN es blanco de críticas por rehusarse a transmitir un documental que había encargado y producido y en el que había un extenso informe sobre el alzamiento contra el régimen de Bahréin, que cuenta con el respaldo de Estados Unidos.
El segmento constaba de entrevistas con activistas bahreiníes enfrentados a la represión y filmaciones de las fuerzas gubernamentales, armadas por Estados Unidos, disparando contra manifestantes desarmados.
El documental, llamado "iRevolución: los guerreros de Internet de la Primavera Árabe”, se transmitió una sola vez por CNN para un público estadounidense. Pero nunca se transmitió por CNN Internacional, como se había previsto al principio, lo que significa que el público del Medio Oriente o de cualquier otra parte fuera de Estados Unidos nunca pudo verlo".
Fuente
"Dejando al margen el protagonismo de la presentadora y el tono más o menos hollywoodiense, el vídeo nos permite, en poco más de diez minutos, hacernos una idea bastante exacta de cómo estaban (y están) las cosas en Bahréin, incluyendo la represión violenta de protestas pacíficas, las detenciones arbitrarias y los intentos del régimen por silenciarlo todo. Uno de los protagonistas del documental, el presidente del Centro por los Derechos Humanos de Bahréin, Nabil Rajab, fue condenado recientemente a tres años de cárcel por haber participado en protestas contra el gobierno". 
Fuente

0 comentarios:

Publicar un comentario